Sesta exposición exhibe una cuidada selección de piezas de la Colección Heritage que rinde homenaje a la experiencia de la casa en el perfeccionamiento de las técnicas artesanales, así como su transmisión a las generaciones venideras.
Estas piezas han sido enriquecidas con algunos de los métiers d’art más ancestrales, tales como el guilloché, engastado, grabado y esmaltado, animan las vitrinas de la boutique de la calle Serrano 68. Revelamos tres de estos relojes excepcionales.
Reloj de bolsillo de oro amarillo de 18 quilates con esmalte traslúcido pulido – 1825
Este reloj de bolsillo de estilo Restauración destaca por su profusa ornamentación floral y amplios frisos. La técnica del champlevé empleada consiste en practicar una oquedad en el metal para aplicar polvo de esmalte y después pasar la pieza por el horno; repitiendo la operación varias veces antes de realizar un lijado final para retirar el exceso de esmalte. De esta forma, aflora con brillantez la decoración, delineada por finos contornos de metal precioso.
La técnica queda realzada especialmente con la indicación de hora saltante a la altura de las 12 h, gracias a la cual el maestro artesano ha contado con una superficie más amplia para poder expresar su creatividad.
Reloj de bolsillo en cristal de roca con calibre esqueleto en oro amarillo – 1986
Los maestros artesanos de esta pieza, no satisfechos con crear y decorar la caja, decidieron ampliar sus conocimientos técnicos y trasladarlos al movimiento, grabando cada uno de los componentes esqueletados. Se trata de una tarea extraordinariamente compleja que convierte a la pieza en una auténtica obra de arte.
Reloj de pulsera para caballero de platino Métiers d ́Art Mercator – 2001
Este modelo es un homenaje al geógrafo Gérard Mercator mediante la reproducción de los mapas de Europa dibujados por él en el siglo XVI sobre su esfera esmaltada policromada Grand Feu a través la técnica del cloisonné. Presenta un Calibre 1120 ultraplano que comenzó a comercializarse en 1967 y comprende uno de los movimientos automáticos más finos del mundo debido a su grosor de 2,45 mm. Cuenta también con doble indicación retrógrada de horas y minutos de movimiento continuo.
Sus agujas retrógradas en forma de compás se diseñaron especialmente para esta colección y la colocación de su eje a las 12 horas evoca a la perfección el instrumento utilizado durante toda la vida del cartógrafo, matemático y geógrafo.